'Casa de les Punxes' de l'arquitecte Puig i Cadafalch
Los amantes del Modernismo y la ciudad de Barcelona están de enhorabuena. Dentro de unos meses, abrirán las puertas al público dos exponentes más de este estilo artístico que, en su vertiente arquitectónica, hizo fortuna en la ciudad.
Se trata de la conocida popularmente como la ‘Casa de les Punxes’, de Josep Puig i Cadafalch, y la Casa Vicens, obra temprana de Antoni Gaudí. La primera, situada en el centro del Eixample barcelonés, se podrá visitar a partir del verano de 2016. Para la segunda, ubicada en una discreta calle del barrio de Gracia, aún no hay fecha definitiva, pero todo apunta al año 2017.
La ‘Casa de las Punxes’, levantada entre 1903 y 1906, es el único edificio modernista de la ciudad que tiene tres fachadas y accesos principales. Coronada por seis torres en forma de pincho (punxa), Puig i Cadafalch se inspiró en el Chateau de Pierrefonds para dar forma al encargo de la familia Terradas. Una construcción de aires medievales que unifica tres edificios de pisos y que llama la atención de todo aquel que se la encuentra en la ruta hacia la Sagrada Familia.
Actualmente se están haciendo obras de limpieza, restauración y adecuación para la visita; destacan las fachadas y terrazas, los ascensores originales y las columnas, también originales, que Puig i Cadafalch utilizó en el interior de la construcción para sustituir los pesados muros de carga.
En la Casa Vicens de Gaudí también se harán obras para habilitarla como en casa-museo. Un futuro centro de interpretación del genial arquitecto que abrirá las puertas al 2017. Los trabajos servirán para retirar elementos añadidos posteriormente y recuperar el aspecto original de la casa que el empresario Manuel Vicens Montaner se hizo construir en Gràcia por un joven y aún desconocido Antoni Gaudí.
