La tradición cristiana de la Pasión se convierte en una representación teatral de calle en esta población de El Baix Empordà. La Procesión de Verges tiene más de 300 años de historia y se celebra cada Jueves Santo.
El misterio que se representa se basa en un libro en verso de fray Antoni de Sant Jeroni de 1773 que adapta el drama de las últimas horas de Jesucristo. La teatralización de la procesión permitía romper la barrera del latín eclesiástico y facilitaba el adoctrinamiento con un lenguaje más cercano.
La procesión arranca desde la iglesia a las 12 de la noche. Durante el recorrido por las calles del pueblo, y bajo la única luz de las antorchas encendidas, se representan las escenas de la Pasión. Todo el mundo espera el momento en que se interpreta la Danza de la Muerte. En esta representación macabra y ancestral de origen medieval cinco esqueletos colocados en forma de cruz saltan y bailan al son de un tambor.
Verges es la única población catalana que conserva esta escenificación, y por esta razón la Procesión de Verges fue declarada Fiesta tradicional de interés nacional en 1983.
Los cuatro esqueletos bailan acompañados del tambor y crean uno de los momentos más solemnes e inquietantes de la procesión