La criba (garbella, en catalán) era un antiguo impuesto que se cobraba sobre ciertos artículos de primera necesidad y, por extensión, también se utilizaba para designar los almacenes donde se guardaban estos productos. La Garbella es precisamente como se conoce la masía del siglo XVIII, en el centro de Arbúcies, donde se encuentra el
Museo Etnológico del Montseny (MEMGA) en la Gabella, un nombre que marca un pasado histórico vinculado a las personas y al territorio. El MEMGA, inaugurado en 1985, se dedica a la
conservación, difusión, investigación y exposición del patrimonio cultural del macizo del Montseny.
La visita a las instalaciones pasa por tres espacios. La planta baja está dedicada a los primeros pobladores y muestra la
evolución de las formas de vida en el Montseny: prehistoria, mundo íbero, romanización y Edad Media. El visitante hace un recorrido por la historia donde se va encontrando objetos representativos (algunos originales, otras reproducciones). Dedica una sala al
castillo de Montsoriu (siglo XIV) con una selección de materiales recuperados durante las intervenciones arqueológicas. Una gran maqueta de la fortificación preside el espacio.
La primera planta se centra en la
sociedad tradicional de autoabastecimiento, que se basaba en la agricultura, la ganadería y la explotación forestal y estaba estructurada alrededor de los cortijos, pilar económico del siglo XIX en el Montseny, hasta la industrialización. Precisamente, la última planta del museo está dedicada a los cambios que produjo la
llegada de la industria en la zona. Dentro de las colecciones del museo cabe destacar las muestras de oficios artesanales y de la primera industrialización.